viviendas en pla de na tesa

El proyecto recoge el objetivo de dotar de viviendas tuteladas para una o dos personas. La idea era que cada una de estas viviendas fuera una casa para su morador. Así nace la idea de realizar cuerpos con cubiertas inclinadas que permitieran una mayor calidad del espacio interior y una visión exterior similar a un conjunto rural, tipología propia de la zona rústica en la que se enclava el edificio. La orientación de las viviendas busca la mejor orientación de sol y de aireación. En el interior se dispone una zona de estar comedor hacia sureste y una de dormitorio a noroeste.

Entre ambas un baño y una cocina que sirve de transición entre ambos de manera que no acaba de compartimentar el espacio ya que no llegan hasta techo, sino que permiten a la cubierta ser continua en toda la vivienda. la fachada sureste tiene unas grandes aberturas que permiten la entrada de luz, protegidas con pérgolas de lamas horizontales en su parte superior y delantera. Este sistema permite más sombra los meses de verano durante las horas de la mañana.

En esta fachada se ha incorporado uno de los elementos que dan nombre a la residencia, los bancos de color de baldosa de cada casa. Esta baldosa de colores también se dispone en la cubierta permitiendo la identificación por separado de cada vivienda. Los espacio exteriores individuales funcionan como lugares de enecuentro de los diferentes habitantes de la residencia.

En la fachada norroeste se ha optado por una ventana de gran formato que incorpora unas lamas verticales que permiten la opacidad de toda la estaancia i alternativamente una gran catidad de luz sin dejar entrar el suelo de poniente en verano. las casas se disponen en hilera, una al lado de la otra haciendo un juego de desplazamientos para crear zonas exteriores más privativas y sombras. En el centro del edificio dos crijías forman la csa común que sirve de lugar de encuentro y participación de todos los moradores.